Ayer noche, en ‘El Intermedio’,
tuve la oportunidad de disfrutar de la entrevista que Gonzo hizo al ginecólogo Josep
Lluis Carbonell. ¿Por qué diablos no hablan TODOS los profesionales de este País
tan claro como él?
¿Cuándo vamos, entre todos, a
poner fin a este revival pseudofranquista PPero, con la connivencia de la
oposición, PSOE a la cabeza?
¿Por qué tenemos que
resignarnos a que nos gobiernen politicuchos neo-fascistillas y corruptos,
apoyados (y apoyando a, claro…), en la Iglesia (¡que vivimos en un País
aconfesional reconocido en nuestra Constitución!), los grandes empresarios, las
grandes fortunas, los banqueros, los sindicalistas preñados de corruptelas, la
Casa Real…
Necesitamos salir a la calle.
Acabar con esta casta impuesta de forma y manera subrepticia. Vivimos en una
falsa Democracia. Necesitamos una Revolución Social, Laboral, Cultural, Educativa,
Sexual… ¡Y la necesitamos YA!
¿Cómo puede, aún, haber gente
que piense que los partidos mayoritarios aportan estabilidad a nuestra
sociedad? ¿Aún tememos una Guerra Civil? ¡ESTO ES RIDíCULO!
Necesitamos urgentemente una reforma
de nuestra Constitución.
Una nueva Ley Electoral. No
hace falta decir nada más al respecto.
Acabar de una vez por todas
con esa institución desfasada que es la Casa Real. No quiero reyes. No los
necesito para nada.
Nuestra Sanidad debe ser
PÚBLICA. Llevamos mucho tiempo pagando por ello.
Nuestra Educación, PÚBLICA,
debe estar por encima de todo. Un Pueblo culto es un Pueblo que sabe lo que
quiere. Un Pueblo que no se va a dejar convencer tan fácilmente como el nuestro
lo ha hecho.
Creo firmemente en el
sindicalismo; en uno moderno, no del que nos venden CC.OO. y U.G.T., caduco,
trasnochado, de postguerra. De hecho, estoy sindicado, pero a uno
independiente. No podemos consentir que nuestros sindicalistas anden tirando de
visa a costa de nuestros impuestos. Un Sindicato que se precie de defender al
trabajador NO PUEDE VIVIR DEL ESTADO. Ni debe. Es una cuestión moral. Debe
subsistir del aporte de sus afiliados.
Tenemos que acabar de una
maldita vez con el papel predominante de la Iglesia. Estos adoctrinadores baratos
de sotana, pan ácimo y vino de domingo a las doce, deben quedarse en sus
templos, que es dónde deben están. Calladitos están más guapos. Y que, si alguien
quiere seguir su ejemplo, sus enseñanzas, que lo haga. En sus iglesias y
colegios. En los míos, pagado con mis impuestos, ¡NO!
Y no temamos a convocarnos a
través de las redes sociales. No tengamos miedo a manifestar nuestras
inquietudes en las calles. QUE A TODOS NO NOS PUEDEN METER EN LA CÁRCEL.
No permitáis que os vendan que
la Derecha atrae y conserva el capital, la inversión. Es la estabilidad de un
país la que permite que eso ocurra.
Lamentablemente, tenemos una
Generación, casi dos, prácticamente perdida. No les interesa el ejercicio del
juego democrático. No existen opciones válidas. Ni para mí. Hagámoslo, entonces, por los más pequeños, por los que, aún, no han nacido. Por su futuro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario