viernes, 2 de septiembre de 2011

El Fútbol que se avecina: Quadrophenia.



Recibo un email de mi amigo Fernando Ortiz recomendándome que lea un artículo del e-diario ‘República de las Ideas’ (www.republica.com, que tiene como presidente a Pablo Sebastián, consejero delegado a José Oneto y está dirigido por Carolina G.-Cortines) en el que, parece, se lleva a cabo un curioso análisis acerca de la actual situación del fútbol en España... Bueno, procedo a su lectura y me encuentro con que, parece, la única forma de sobrevivir en el futuro que se avecina (ojo, hablamos de fútbol) es que los clubes ‘más pequeños’ (léase que no sean Real Madrid o Barcelona) procedan de forma y manera similar a lo que hacen las empresas, esto es, ‘asociarse’… Según el articulista (de nombre ‘Marcello’, tiene gracia la cosa), sólo alianzas del tipo Betis-Sevilla, Valencia-Villa Real-Hércules, Atlético de Madrid-Getafe-Rayo Vallecano y/o similares pueden crear ‘monstruos’ capaces de competir con los que se están llevando ‘la parte del León’.

El enlace al mencionado artículo, por si os interesa echar un vistazo, es http://www.republica.com/2011/08/31/el-sevilla-y-el-betis-se-deben-fusionar_380381/.

¿Qué pensar al respecto? Bueno, la idea está ya muy trillada, todos habremos leído algo acerca de esto, incluso habremos mantenido más de una conversación de barra de bar o similar alguna que otra vez. Lo que ocurre es que en el mundo empresarial no existe la fusión (es una gran falacia), existe la absorción ('el pez grande se come al chico'). El mundo de los negocios es cruel, fagocitario, no hace prisioneros (son demasiado caros de mantener), no existen rehenes (no se piden rescates, a degüello con ellos y sus propiedades pasan a ser del vencedor de la contienda)…

…Por no hablar del tema 'romántico'. El corazón de un aficionado puede estar en el Madrid o en el Barcelona, NUNCA en ambos. De hecho, una cosa es celebrar las victorias de la Selección Española – cosa que yo no hago – con fiestas más o menos etílicas (y algo más) dejándose embaucar por el efecto de la 'masa' (y de las titis que pululan ligeras de ropa y, obviamente, ebrias en buen número) y otra alegrarse de que también algún que otro maldito jugador del eterno rival acabe aclamado por enfervorecidas multitudes para, en definitiva, acabar en posesión del mismo título que los que tú y los tuyos idolatráis.

Es como si, en medio de las refriegas que mods y rockers ‘celebraban’ en las playas de Brighton en el 64’ (véase 'Quadrophenia', 1979 – y oigase a 'The Who' sonando de fondo –), una luz descendiera por entre los nubarrones e iluminara a ‘Ace Face’ (en la versión española, ‘As de Oros’; sí, no podía ser otro que Sting…) y, de pronto y sumido en un trance, dijera: ‘¡Todo el mundo al suelo!’ (¡Oops!, perdón, no sé en que estaba pensando)…, ¡Ejem…!, quiero decir, ‘¡Todos quietos! ¡He visto la luz! (sí, esto es de los ‘Blues Brothers’). La única forma que tenemos de ganar esta batalla es unirnos y, así nos haremos más fuertes. Más poderosos para ir a España y zurrarles la badana a los 'nuevos flamencos' (que ni nuevos ni flamencos)…

…No, no se unirían jamás, aunque, dicho sea de paso, yo les acompañaría de muy buen grado a darles un repaso a esos... Y, de paso, a los 'triunfitos', a los de los '40 criminales', – como los rebautizara el gran Mariscal Romero –, a los del reggaeton... ¡Hay tanto imbécil a quién zurrar y tan poco tiempo disponible para hacerlo...!


Igual si las mencionadas alianzas entre clubes resultaran fructíferas, es muy posible que 'Los Dos Grandes' encontraran, por fin, la horma de su zapato. Igual si esto último hubiera ocurrido, Jimmy no hubiera sabido nunca que ‘Ace Face’ era, en realidad, un simple botones de hotel. Y nunca se hubiera arrojado por los acantilados de Beachy Head.


martes, 30 de agosto de 2011

Time Is On My Side.

…Déjame terminar, Eric. No me queda mucho tiempo y quiero que todo quede registrado. Con un poco de suerte, no sólo te legaré mi fortuna (a la que, seguro, sabrás dar buen uso), también ésta será mi aportación, la última, nuestra última colaboración.

…La primera vez que la vi supe que era ella. No sólo su voz, no. Era todo. Nunca pensé encontrarla en un casting, el primero al que asistía. Aunque exigente con mi trabajo, nunca lo era con el de aquellos que fingían ser los personajes de mis guiones. Tú, Eric, siempre elegiste bien, siempre acertabas. Sin embargo, algo me hizo, esa tarde de Diciembre, aceptar tu proposición, la de mi único amigo y director de todo lo que de mi pluma zarpaba rumbo a la gran pantalla. ¿Recuerdas nuestra conversación telefónica? ‘Bueno, iré, no insistas… Sí, sé que ya era hora… ¿A las 10? ¿Tan temprano…? Vale… No, no te preocupes que allí estaré… Y No, no estoy borracho, aún no. Déjame seguir trabajando. Hasta mañana…’.

Y allí estaba. Las 10 y sentado en una incómoda butaca, viviendo aún de los efectos del bourbon de la noche anterior, café en mano que apenas hacia soportable la resaca. Tú no parabas de levantarte, dar órdenes y hacer gestos. Las 11. Ignoro cuántos fueron los cigarrillos que pasaron por mis labios en esa hora interminable. Las 12. Parecías no cansarte nunca. ‘Quiero una cara nueva, fresca, joven’, me habías dicho días atrás. ‘Es, posiblemente, el mejor papel femenino que hayas escrito nunca y no quiero que quede vinculado para siempre con alguna actriz conocida. Debemos buscar algo diferente.’… Pero, luego de 2 horas, nada de nada. Todas las chicas eran la misma persona, la misma actriz. Sí, el físico parecía corresponderse con nuestras exigencias, pero carecían de alma.

‘¡Eric! ¡Ven aquí! Ya sé porqué no he asistido nunca a uno de estos-tus eventos. ¡Es horrible! No aguanto más tanta mediocridad así que, con tu permiso, lo dejo – como siempre – a tu elección’. Abriste la boca para decir algo pero tan sólo lanzaste un manotazo al aire, giraste sobre tus talones, volviste sobre tus pasos y le dijiste a Rebeca, tu secretaría, que hiciera pasar a la siguiente aspirante.

Con mi abrigo y mi bufanda puestos, me disponía a colocar el sombrero sobre mi cabeza y largarme de ese antro de tedio cuando, de pronto, una voz hizo que volteara mi cabeza. Y ahí estaba ella. ‘…Me…, me llamo Cynthia, Cynthia Ozick – como la escritora judía, pensé… – ; aunque soy española, mi padre era ruso, de ascendencia judía, de ahí el apellido… Tengo 23 años, he terminado mis estudios de…’. Y hasta ahí fui capaz de oír. Levantó ligeramente la mirada y, al cruzarla con la mía, perdí la noción del tiempo. Durante un instante, no pude evitar pensar en Walter, pobre vendedor de seguros devorado por la millonaria Phyllis en 'Double Indemnity' – ‘En cuanto vi ese tobillo bajar por la escalera, supe que estaba muerto’, narra en off Fred MacMurray a Edward G. Robinson al ver esa delicada y sexy porción de la anatomía de Barbara Stanwyck aparecer por el hueco de la escalera… –. Me senté de nuevo, sombrero en mano, y dejé que llevaras a cabo todas las probaturas que estimaste oportuno. No fue necesaria mi intervención. En una eternidad que apenas duró unos minutos, te dirigiste a mi asiento y me dijiste: ‘Es la primera vez que consulto esto con alguien que no sea Rebeca o un productor pero, ya que estás aquí y, ya que te has quedado, supongo que tendré que preguntártelo… ¿Qué opinas?’. Nunca me quedo mudo, siempre tengo algo que decir. Y en esta ocasión no iba a ser menos. ‘Sí – dije –, me gusta. Creo que da el perfil que buscábamos para mi personaje. Parece que, menos mal, no he perdido del todo la mañana’.

En cuanto terminaron las pruebas, no dude un solo segundo en dirigirme a Cynthia, presentarme como el magnífico guionista que era (algo que, estaba seguro, ella sabía), felicitarla por, obviamente, haber conseguido el papel e invitarla a un almuerzo en mi restaurante favorito. Dijo conocerme y haber visto no sólo todo aquello que en la gran pantalla llevaba mi firma como guionista sino, además, haber leído cada una de mis novelas con todo el interés posible.

Y, sí, estuve presente durante todo el rodaje, aunque eso ya lo sabes. Cada mañana me presentaba impoluto, poco importaban plató o exteriores. A pesar de mi resaca, mal menor si se comparaba con lo que, desde el primer instante en que nuestras miradas se encontraron, comenzamos a sentir el uno por el otro… O, al menos, era lo que yo creía… En este mundo poco importa la diferencia de edad: es algo a lo que estamos habituados. ¡Y ella era tan joven y tan hermosa! ¡Desprendía tanta frescura, tanta vitalidad!

…En cuanto a lo que a partir de aquí hasta el estreno ocurrió es de sobras por – casi – todos conocido: presentaciones en sociedad, fiestas, cenas, mas fiestas, otras fiestas… No sé en qué momento me supe arrastrado por la vorágine de su belleza, probablemente, como ya he dicho, desde que mis ojos se miraron por primera vez en los suyos, pero llegó un momento en el que perdí absolutamente el control de mis actos. Me supongo, Eric, que te parecerá algo trivial y quizá tengas razón. Matar a alguien por una mera cuestión de celos es algo que no me va. Pero, llegados a este punto y al respecto, recuerdo una de mis sentencias favoritas de mi admirado Oscar Wilde a la que deseo parafrasear: ‘Nunca tuve tiempo de estar celoso de ninguna de mis esposas ¡Estaba tan ocupado en estarlo de los maridos de las demás...!’. Pero, en fin, como Robert Cummings dice a Ray Milland en 'Crimen Perfecto', ‘En los mejores guiones, las cosas salen como uno quiere, pero en la vida real no, amigo’… Y eso es lo que ocurrió. 
Si Jerry Ragovoy hubiese nacido con 50 años nunca hubiera escrito 'Time Is On My Side' ni jamás la hubieran, por tanto, interpretado los Stones… Pero, afortunadamente, pasó por la adolescencia en unos años felices y prometedores, los 60’. En cambio, para mi, ahora, el tiempo no está para nada de mi lado. Oigo las sirenas, por lo que, supongo, alguien habrá oído los disparos y llamado a la policía. Lleva esto a la gran pantalla. Sé que no es el primer guión que carga con este tipo de material pero seguro que tu, Eric, serás capaz de hacer una obra maestra de él. Y no me despidas de ella, ya lo hice. Cubre su cadáver, no me gustaría que nadie la viera en ese estado, aunque creo que ya poco importa. Y manda a limpiar la piscina en cuanto los chicos terminen con la investigación. No me hace ninguna gracia que los que visiten mi mansión se encuentren con un tipo tan desagradable como el que tu, querido amigo, has visto que flota en sus aguas dejando que su sangre lo coloree todo de un rojo tan estúpido. Guarda, también, mi revólver entre tus objetos más valiosos. Estoy seguro de que cuando todo acabe, la policía no tendrá inconveniente alguno en que así sea. Y recuérdame (y recuérdala también a ella) cada vez que lo contemples.


viernes, 26 de agosto de 2011

Soda Stereo. Ella Usó Mi Cabeza Como Un Revólver.


Dentro del significado que las grandes bandas argentinas suponen para el Rock’Roll, ésta de Gustavo Cerati siempre me ha dado la sensación de estar situada un peldaño por encima del resto. Temas como Canción Animal, Comfort Y Música Para Volar, Signos, Sueño Stéreo, Te Hacen Falta Vitaminas, Nada Personal, En La Ciudad De La Furia y ésta de la que os pongo un vídeo en directo, Ella Usó Mi Cabeza Como Un Revólver, corroboran mi sentir. Un sutil perfume Beatles (I Am The Walrus) pasado por un filtro Tears For Fears (Sowing The Seeds Of Love) lo confirma. Y frases como ‘Después de un baño cerebral estaba listo para ser amado’, también. Soda Stereo.


martes, 23 de agosto de 2011

Jerry Leiber.

Ha fallecido Jerry Leiber, famoso, no sólo por ser la pareja artística del compositor Mike Stoller y por escribir la letra de Hound Dog para Elvis Presley. Entre otras joyas, fue autor de letras de temas como Jailhouse Rock, King Creole, Love Potion nº 9, Kansas City, Poison Ivy, Stand By Me (junto a Ben E. King) o Spanish Harlem (junto a Phil Spector). Como homenaje (y ya que, lo siento, no soy muy de Elvis), Love Potion Number 9 de The Searchers, a la sazón nº 3 en las listas de ventas de los Estados Unidos en el 64'...


viernes, 5 de agosto de 2011

Belle & Sebastian - I Want The World To Stop.

I Want The World To Stop. 'Bonito' tema de Belle & Sebastian, 4º corte de su último álbum, Write About Love. Algunos de sus seguidores pensarán que no tiene nada que ver con lo anterior, pero ¡qué más da! El tratamiento del tema en sí, la belleza de la melodía y la simplicidad de los arreglos lo hacen hermoso...

The Waterboys - The Whole Of The Moon.

Acabo de oír en ‘Radio 3’ un tema, magnífico, que tenía olvidado y que me trae buenos recuerdos. No es otro que The Whole Of The Moon de The Waterboys, tema que alcanzó el top 26 en el 85’. Magnífica banda la de Mike Scott y muy buen LP This Is The Sea al que pertenece el tema en cuestión, 2 corte de la cara ‘A’. Disfrutad de él en directo...


jueves, 7 de abril de 2011

Vocalistas británicos de los 80'.

Este post nace como disputa con un amiguete el cuál me desafía a que le diga, ya que soy (o lo fui) un chico de los 80' y 'pro-british music', un vocalista de esa década mejor que ¡Bunbury! (que, por cierto, no me gusta nada; imitar a Jim Morrison, plagiar a Bowie... ¡En fin, qué decir del 'Morrison de los Monegros'...!)... Y eso por no hablar del Bunbury compositor...

Ya puestos, me dije que uno no, que una docena. Y todo ello sin recurrir a los grandes como Bowie o Costello, sin echar mano de Howard Devoto (Magazine), Steve Strange (Visage), Gary Numan, Ian Dury, Philip Oakey (The Human League) o Sting (grande como compositor y como cantante, petardadas portuguesas aparte...). Incluso sin Ian McNabb (Icicle Works... por cierto, buena banda; a tener en cuenta su Love Is A Wonderful Colour). Y, obviamente, sin féminas; esto merece un post aparte que llegará en breve.

Así que, manos a la obra, elegí la docena en cuestión y un tema de cada uno. Juzgad vosotros mismos. ¡Ah!, como siempre, por orden alfabético para que nadie se me enoje... También tenéis un enlace a las webs 'oficiales' pinchando en el nombre o en la línea de texto que precede a la imagen de la portada del single:

Nombre
Tema
Año
Joan Of Arc (Maid Of Orleans)
1981
Everything Counts (In Larger Amounts)
1983
Temptation
1983
Love Will Tear Us Apart
1980
The Killing Moon
1984
Up On The Catwalk
1983
When I Dream
1980
Come On Eileen (Too-Rye-Ay)
1982
Tainted Love
1981
The Voice
1981
This Charming Man
1984
One Better Day
1984



















...En fin, espero que os haya gustado y que eso refuerce la idea de que, sí, hay muchísimos mejores vocalistas que el de Zaragoza. Saludos.

martes, 15 de marzo de 2011

Lorca y la Cultura.

Parece que el insigne poeta granadino lo tenía tan claro como que no hay Dios. Aplicable a cualquier época, éste fue el discurso que pronunció en la inauguración de una biblioteca en Fuentevaqueros hace 80 años, en Septiembre del 31'...


Medio pan y un libro. 

Alocución de Federico García Lorca al pueblo de Fuente Vaqueros (Granada) en septiembre de 1931.


"Cuando alguien va al teatro, a un concierto o a una fiesta de cualquier índole que sea, si la fiesta es de su agrado, recuerda inmediatamente y lamenta que las personas que él quiere no se encuentren allí. «Lo que le gustaría esto a mi hermana, a mi padre», piensa, y no goza ya del espectáculo sino a través de una leve melancolía. Ésta es la melancolía que yo siento, no por la gente de mi casa, que sería pequeño y ruin, sino por todas las criaturas que por falta de medios y por desgracia suya no gozan del supremo bien de la belleza que es vida y es bondad y es serenidad y es pasión.


"Por eso no tengo nunca un libro, porque regalo cuantos compro, que son infinitos, y por eso estoy aquí honrado y contento de inaugurar esta biblioteca del pueblo, la primera seguramente en toda la provincia de Granada.

"No sólo de pan vive el hombre. Yo, si tuviera hambre y estuviera desvalido en la calle no pediría un pan; sino que pediría medio pan y un libro. Y yo ataco desde aquí violentamente a los que solamente hablan de reivindicaciones económicas sin nombrar jamás las reivindicaciones culturales que es lo que los pueblos piden a gritos. Bien está que todos los hombres coman, pero que todos los hombres sepan. Que gocen todos los frutos del espíritu humano porque lo contrario es convertirlos en máquinas al servicio de Estado, es convertirlos en esclavos de una terrible organización social.

"Yo tengo mucha más lástima de un hombre que quiere saber y no puede, que de un hambriento. Porque un hambriento puede calmar su hambre fácilmente con un pedazo de pan o con unas frutas, pero un hombre que tiene ansia de saber y no tiene medios, sufre una terrible agonía porque son libros, libros, muchos libros los que necesita y ¿dónde están esos libros? 


"¡Libros! ¡Libros! Hace aquí una palabra mágica que equivale a decir: «amor, amor», y que debían los pueblos pedir como piden pan o como anhelan la lluvia para sus sementeras. Cuando el insigne escritor ruso Fedor Dostoyevsky, padre de la revolución rusa mucho más que Lenin, estaba prisionero en la Siberia, alejado del mundo, entre cuatro paredes y cercado por desoladas llanuras de nieve infinita; y pedía socorro en carta a su lejana familia, sólo decía: «¡Enviadme libros, libros, muchos libros para que mi alma no muera!». Tenía frío y no pedía fuego, tenía terrible sed y no pedía agua: pedía libros, es decir, horizontes, es decir, escaleras para subir la cumbre del espíritu y del corazón. Porque la agonía física, biológica, natural, de un cuerpo por hambre, sed o frío, dura poco, muy poco, pero la agonía del alma insatisfecha dura toda la vida.

"Ya ha dicho el gran Menéndez Pidal, uno de los sabios más verdaderos de Europa, que el lema de la República debe ser: «Cultura». Cultura porque sólo a través de ella se pueden resolver los problemas en que hoy se debate el pueblo lleno de fe, pero falto de luz".

miércoles, 2 de marzo de 2011

France Gall - Poupée De Cire, Poupée De Son.


France Gall, (nacida Isabelle), viene al mundo en parís un 7 de octubre del 47' (bueno, Libra como yo y como Johnn, aunque dos días antes -del año, no hablamos... -). Desde muy pequeña, aprende guitarra y piano. Su primera obra, navegando al pairo de su padre, un 45 rpm en el 62'. Mi favorita, compuesta por el desaparecido hace hoy 20 años Serge Gainsbourg, Poupée De Cire, Poupée De Son. Echémosle un vistazo a la grabación para el Festival de Eurovisión del 65' en Luxemburgo. Y sí, también era muy linda... ¡Qué le vamos a hacer!

lunes, 14 de febrero de 2011

14-F

No pensaba postear nada al respecto en referencia al día en que nos encontramos, que no es otro que el mal llamado ‘Día del Amor’ - ¿no deberían serlo todos? –, pero, viendo ayer noche en ‘La 2’ – si…, sé que, como cinéfilo debería haber estado viendo la ‘XXV Ceremonia de Entrega de Los Premios Goya’… o no…, pero es que no soporto a Buenafuente y, cada vez que aparecía, zapping al canto… – la serie ‘Pushing Daisies’, esto es ‘Criando Malvas’, no tuve más remedio que hacer una reflexión… En esta serie, el protagonista es capaz de resucitar a alguien con sólo tocarlo; claro que, como ocurre en el Universo, al menos, en éste, toda acción lleva aparejada una reacción: si vuelve a tocar a esa persona, muere para siempre y, si transcurrido un minuto no lo hace, ésta seguirá viva pero el que más cerca ande por allí, morirá en su lugar – lo que decía antes del Universo en que nos ha tocado vivir… ‘Quid pro quo’, ¿no…? –. Obviamente, el día en el que se entera de que su antigua novia de la que la habían apartado muere en un crucero, la resucita, palmando el director de la funeraria en su lugar…

…Pues bien, imaginaos que ocurre esto con vuestra chica y que gozáis de la habilidad comentada… ¿Le devolveríais la vida? ¿A cambio de qué?

Si sirve de algo YO SÍ QUE LO HARÍA. Aunque me esté mal el decirlo, hay mucha gente que merece morir antes de su hora – incluso que no debiera haber nacido… –. Y no me importaría tener que envolverme en plástico de los pies a la cabeza con tal de sentir, aun a éste través, el contacto de su piel, mi lengua en su boca, su lengua en la mía. Ni las 11.000 vírgenes de Colonia postradas ante mí, esclavas a mi disposición. harían que cambiara de opinión. Puede que el amor esté sobrevalorado, puede que suene exagerado..., quizá ambas cosas, pero es que soy así. La vida sin pasión no sirve para nada.

jueves, 3 de febrero de 2011

The Day That The Music Died.

Pues sí, hoy es el aniversario, 52 años ya de la tragedia. El Día En Que La Música Murió.

Aunque no es para celebrarlo, Holly, al igual que Booper o Valens bien se merecen un pequeño homenaje a través de este tema, del primero, Everyday, séptimo tema de aquel magnífico álbum del 58', Buddy Holly, que contenía como segundo corte su también famoso Peggy Sue.

Elijo a Buddy no sólo como figura más relevante sino, además, porque me apetece.

Como escribiera el crítico Bruce Eder'Holly became the single most influential creative force in early Rock'&'Roll' - 'Holly se convirtió en la más influyente fuerza creativa individual del temprano Rock'&'Roll'.

(http://www.allmusic.com/artist/buddy-holly-p4502/biography).


¡Ah!, un saludo para Mclean...!

martes, 1 de febrero de 2011

Gene Krupa.

Es curioso comprobar como, cada vez que en la Red aparece una 'lista', un 'ranking', posee innumerables bajas. Bien es sabido que, se trate el tema que se trate, es imposible contentar a todo el mundo (las opiniones son como el culo, todos tenemos uno) aunque, en la mayoría de los casos, ¡Hay que documentarse!, que el desconocimiento de la Ley no exime de su cumplimiento... Pues bien, veía hace bien poco una que pretendía reflejar los mejores baterías de la Historia de la Música y en la que se incluían bastantes manazas inútiles (mucho ruido y pocas nueces), obviándose, entre otros, 'ejemplares' de la talla de Ginger Baker (Cream) o Barriemore Barlow (Jethro Tull)... Obviamente, en cuanto a los máximos exponentes del Swing o el Jazz, silencio absoluto (ignorancia absoluta). Nada de los grandes de las Big-Bands. No sé que opinarán los que dejan a un lado, obviamente por desconocimiento, a músicos de esta envergadura, pero refleja una idea del nivel de los que elaboran las susodichas listas..., y de los que las votan.

Y, como no me apetece colgar vídeos de virtuosos en la materia, atentos a éste de Gene Krupa, en su memorable cameo en el film del 41' Ball Of Fire (Bola de Fuego), en el que él y su banda interpretan una versión de Drum Boogie. Y atentos, ¡como no!, a la belleza de Barbara Stanwyck... Que no todo es pose y aporreo...


martes, 18 de enero de 2011

Epitafio.

En la soledad de la noche, los ‘tic’ del reloj de la biblioteca son cada vez más ‘tac’. Su martilleo, incesante, se propaga en la oscuridad, rebotando una y otra vez contra las sombrías paredes, imposible de ser ahogado por los vetustos volúmenes y las recias maderas que los sostienen, reverberando en el silencio, haciéndome sentir como si acabara de despertarme, solo, en una inmensa catedral, dejando una huella profunda y umbrosa en mi cuerpo y aún más en mi alma.

Los más de los días, no sin esfuerzo, salgo huraño de mi lecho y me arrastro hasta el baño donde, desganado y sin esperanza, alzo la cabeza del suelo para, desde las telarañas que nublan mi visión encontrarme, resignado, cara a cara, en un vetusto armazón de madera y nitrato de plata, un pálido reflejo en el que tan sólo distingo vagamente el rostro de un tipo al que ya no acierto a reconocer ni tan siquiera como un triste recuerdo de lo que alguna vez llegó a ser.

A veces deseo mutar, renovar por completo mi cuerpo, irreconocible por los demás, manteniendo mi mente intacta y sabia, recomenzando una y otra vez amparado en una madurez física plena hasta el fin de los tiempos… ¡Sueños!

Cada año, ¿el final? está más cerca. Y no, no temo a la muerte, ni al dolor. Tan sólo, quizá, a lo desconocido, a qué vendrá después. ¿Sentiré de nuevo el calor de unos senos firmes en mis manos, la humedad en mi boca de una lengua ajena a la mía? ¿Seré capaz de amar, de nuevo, alguna vez? ¿Volveré a sentirme amado?

Tan sólo me queda la esperanza de convertirme en energía pura, en puro cosmos y vagar por la negrura del infinito eterno alimentándolo, contemplando galaxias cada vez más remotas, cada vez más hermosas, que me darán su brillo a cambio de lo que alguna vez me mantuvo vivo, en pié, sobre este planeta privilegiado habitado por generaciones de seres humanos miserablemente estúpidos e ignorantes, incapaces de ver más allá de su propio ego, tan vacío como ellos mismos y que algunos llaman Tierra.